Con la Ley Orgánica de los Archivos del Reino del 12 de noviembre de 1818, los Borbones instituyeron en cada capital de provincia los archivos provinciales, que debían reunir los documentos pertenecientes a todas las Administraciones del territorio de la provincia que fueran “dignos de conservación”.
El Archivo provincial de Terra di Lavoro, una de las 12 provincias del Reino de las Dos Sicilias, fue fundado en 1818 y tuvo inicialmente su sede en Capua. En 1850 fue reubicado a Caserta, nueva sede de la provincia a partir de 1819. Durante la época fascista (1927) la provincia de Terra di Lavoro fue temporalmente suprimida y el instituto fue degradado a “sección” del Archivo de Estado de Nápoles hasta la reconstitución de la provincia, realizada en 1945.
Oficialmente, el Archivo de Estado de Caserta “nace” como consecuencia del Decreto del Presidente de la República del 30 de septiembre de 1963, que reorganiza toda la normativa italiana en materia de Archivos.
Desde 2017, el instituto se encuentra ubicado en la fachada principal del Palacio Real de Caserta, en los locales de la planta baja y entreplanta, diseñados por el arquitecto papal Luigi Vanvitelli como sede de las Secretarías de Estado, órganos administrativos garantes del buen gobierno de la nueva monarquía ilustrada deseada por Carlos de Borbón.
